La palabra TRANSIÇÂO, escrita en el claustro del antiguo Convento de Sâo Domingos reconvertido en biblioteca, nos habla del paso del tiempo. De que nada es eterno y todo se transforma.
En una pequeña calle del centro de Abrantes, nos encontramos con la palabra SILÊNCIO, que nos traslada a la calma portuguesa retratada por el poeta abrantino Mário Rui Cordeiro en su poema «Paixao das viagens».
«…a distância ama o horizonte, o criminoso ama o seu crime preferido, não há amor diante dum espelho que se quebra, a matéria redopia para que o espírito das mãos a toque com amor, uma palavra ama o silêncio».