El Arte puede ser un medio de gran alcance para incorporar criterios de conservación costera, formar y sensibilizar a la población de la importancia de la preservación del patrimonio natural.
Este proyecto se desarrolla sobre 52 barcas que descansan en el manglar de Manzanillo, en la provincia de Montecristi, República Dominicana.
Se trata de una obra de carácter paisajísitico que altera el aspecto del manglar. Las barcas, a través del uso del color, se convierten en una especie más del ecosistema.